Cuando pensamos en establecer nuevas metas o retos, generalmente la fecha de inicio es el primer día de un nuevo mes o el primer día de la semana laboral, el lunes. Normalmente, todos a principio de la semana nos damos un espacio para reflexionar y planear nuestros siguientes días, y en ese momento, cuando podemos aprovechar para establecer objetivos y propósitos semanales, quincenales, mensuales o anuales.
Si buscamos mejorar en el terreno nutrimental y llevar una dieta correcta, la propuesta del “Lunes sin carne” o “Meatless Monday” puede ser parte de ello. “Lunes sin carne” es una iniciativa internacional y sin fines de lucro, cuyo objetivo es no consumir carne un día a la semana. Con ello se logra también, la reducción del consumo de grasas saturadas, proveniente de alimentos de origen animal en la dieta del ser humano (se piensa que se logra lo equivalente a disminuir entre un 10-15% del total de grasa saturada en 7 días).
Esta iniciativa alimentaria inició en el 2003, con el apoyo de The Monday Campaigns Inc. en asociación con el Centro de Salud Pública Johns Hopkins Bloomberg School for a Livable Future, en Estados Unidos. Aunque el movimiento tuvo su origen en Estados Unidos, actualmente la iniciativa se encuentra presente en aproximadamente 30 países. En México, participamos en esta iniciativa de “Lunes sin Carne” y ha tomado auge a través de los años, involucrando al sector salud, a la secretaría del medio ambiente, a la industria alimentaria y a la sociedad en general[1].
Beneficios de Lunes sin Carne
En el terreno de los beneficios, podemos pensar en la parte biológica y fisiológica para el ser humano y también en el componente social y ambiental, que representa para todo el planeta. A nivel salud, las investigaciones científicas y meta- análisis clínicos, han comprobado que, disminuir nuestro consumo de carne roja, puede reducir significativamente el riesgo de enfermedades crónicas prevenibles como el cáncer, especialmente con cáncer colorrectal, pulmonar, esofágico y gástrico.[2]
También, con evidencia científica y numerosos estudios, se ha demostrado que llevar una dieta rica en el consumo frutas y verduras variadas, puede reducir el riesgo de desarrollar cáncer y prevenir enfermedades cardiovasculares[3].
A nivel nutrimental, dejar de consumir carne un día a la semana, no alterará tus requerimientos diarios de proteína. Recordemos que existen combinaciones de proteínas de origen vegetal, que pueden alcanzar un alto valor biológico (por ejemplo, la mezcla de cereales integrales con leguminosas). Por la parte de vitaminas y minerales, tampoco se corre riesgo de deficiencia de hierro o vitamina B12, si hacemos un equilibrio dietético en su consumo, a lo largo de toda la semana.
Es importante encontrar recetas, menús e ideas deliciosas y variadas que puedan utilizarse en el “lunes sin Carne” para toda la familia.
A continuación, te comparto algunos ejemplos de platillos y complementos que puedes adoptar para llevar a cabo tu lunes sin carne:
· Tacos de frijol con tortilla de maíz y guacamole.
· Arroz con frijoles (famoso moros con cristianos) acompañado de unas rebanadas de plátano macho.
· Tostadas de maíz horneadas con hummus (pasta de garbanzo) y jitomate rebanado.
· Chiles rellenos de picadillo de soya.
· Batido de proteína aislada de soya preparado con fresas y frambuesas.
· Ensalada de lentejas con pico de gallo.
En la creatividad culinaria estará la diversión y el gusto para preparar diferentes platillos. Cada país aporta su cultura, tradiciones y gastronomía para crear platillos variados para cada “Lunes Sin Carne”.
Por Marien Garza, Miembro del Consejo Consultor de Nutriólogos de Herbalife Nutrition
[1] Soto J. ¿Cuál es el origen del lunes sin carne? Green Peace México, 2020. Disponible en: https://www.greenpeace.org/mexico/blog/4026/cual-es-el-origen-del-lunes-sin-carne/
[2] Lippi G, Mattiuzzi C, Cervellin G. Meat consumption and cancer risk: a critical review of published meta-analyses. Crit Rev Oncol Hematol. 2016; 97:1-14.
[3] Aune D, Giovannucci E, Boffetta P, et al. Fruit and vegetable intake and the risk of cardiovascular disease, total cancer and all-cause mortality-a systematic review and dose-response meta-analysis of prospective studies. Int J Epidemiol. 2017 Jun 1;46(3):1029-1056