El cabello también sufre los estragos del frío, con puntas abiertas, frizz y pérdida de brillo siendo los principales problemas reportados durante el invierno. De acuerdo con un estudio de la International Journal of Trichology, la exposición prolongada al aire seco y los cambios de temperatura afectan la cutícula del cabello, debilitándola con el tiempo.
Para evitarlo, sigue estos consejos respaldados por expertos:
- Hidratación profunda: Usa mascarillas ricas en aceites naturales como argán, coco o almendra una vez a la semana. Estas actúan como barreras protectoras y ayudan a reparar el cabello dañado.
- Reduce el uso de calor: El uso de planchas y secadores en exceso puede empeorar los efectos del clima. Opta por secados al aire o utiliza protectores térmicos.
- Invierte en productos sin sulfatos: Estos limpiadores suaves mantienen los aceites naturales del cabello, reduciendo la sequedad.
El invierno no tiene que ser una sentencia para tu cabello. Con los productos adecuados y un poco de atención extra, puedes mantenerlo saludable y radiante durante toda la temporada.