En un giro inesperado, NVIDIA y AMD han llegado a un acuerdo con el Gobierno de los Estados Unidos que les permitirá continuar vendiendo sus chips de IA en China, pero con una condición que ha sorprendido a muchos: ceder el 15% de los ingresos generados por estas ventas al gobierno estadounidense. Este acuerdo marca un precedente sin igual en la industria tecnológica, donde nunca antes una compañía había accedido a compartir sus ganancias para obtener licencias de exportación.

El contexto de este acuerdo se remonta a las tensiones comerciales entre EE. UU. y China, donde el gobierno estadounidense ha impuesto una serie de restricciones a la exportación de tecnología avanzada, incluyendo chips de IA, con el objetivo de frenar el avance tecnológico chino. Sin embargo, esta estrategia parece haber tenido un efecto contrario, impulsando a China a desarrollar sus propias tecnologías, como los chips de Huawei y los modelos de IA como DeepSeek. NVIDIA, en un intento por adaptarse a estas restricciones, desarrolló el chip H20, diseñado específicamente para cumplir con las regulaciones de EE. UU., pero incluso esto no fue suficiente para evitar las prohibiciones iniciales.

Este acuerdo no solo beneficia a NVIDIA y AMD, permitiéndoles mantener su presencia en el lucrativo mercado chino, sino que también plantea preguntas sobre el futuro de las relaciones comerciales entre EE. UU. y China. ¿Estamos ante un nuevo modelo de negociación donde las empresas deben pagar por el derecho a exportar? Mientras tanto, las empresas chinas se preparan para hacer grandes pedidos de estos chips, lo que podría significar un alivio para los ingresos de NVIDIA y AMD, aunque a un costo significativo. Este caso sin duda dejará una marca en la historia de la tecnología y las relaciones internacionales.

Por Editor