Dormir bien no solo es esencial para nuestra salud física, sino también para nuestro bienestar emocional y mental. Según la Fundación Nacional del Sueño (NSF), los adultos necesitan entre 7 y 9 horas de sueño de calidad cada noche para mantener un rendimiento óptimo y prevenir enfermedades crónicas.
Sin embargo, factores como el estrés, los dispositivos electrónicos y los horarios irregulares pueden alterar nuestro descanso. Aquí te compartimos algunos tips respaldados por expertos para mejorar tu calidad de sueño:
- Establece una rutina fija: Ir a la cama y despertarte a la misma hora todos los días regula tu reloj biológico y mejora la calidad del sueño.
- Evita el uso de pantallas antes de dormir: La luz azul de los dispositivos electrónicos inhibe la producción de melatonina, la hormona que induce el sueño. Apaga los dispositivos al menos 30 minutos antes de acostarte.
- Crea un ambiente relajante: Mantén tu habitación oscura, silenciosa y fresca. El uso de aromaterapia con aceites esenciales como lavanda puede ser un gran aliado.
Dormir bien es un regalo que le damos a nuestro cuerpo. En este Día Mundial del Sueño, haz un compromiso contigo misma para cuidar tu descanso y disfrutar de todos los beneficios que este aporta.