El brunch es esa maravillosa combinación de desayuno y almuerzo que nos permite disfrutar de platillos deliciosos en un ambiente relajado. Si quieres sorprender a tus amigos o familiares con un brunch casero, aquí te damos algunas ideas para que sea inolvidable.
Comienza con un buen café. Un café de calidad es esencial para cualquier brunch. Si tienes una cafetera francesa o una máquina de espresso, úsala para preparar bebidas como lattes o cappuccinos. Ofrece opciones como leche de almendra o avena para quienes prefieren alternativas sin lácteos.
En cuanto a la comida, los huevos son un clásico del brunch. Prepara huevos benedictinos con un toque personal, como agregar espinacas o salmón ahumado. Otra opción son los huevos revueltos con hierbas frescas y queso de cabra.
Los panqueques o waffles son otro imprescindible. Sirve una pila de panqueques esponjosos con mantequilla y jarabe de arce, o prepara waffles crujientes y acompáñalos con frutas frescas y crema batida.
No olvides incluir opciones saludables. Una ensalada de frutas frescas, un bowl de yogur con granola y miel, o tostadas de aguacate con semillas de chía son excelentes alternativas.
Para las bebidas, ofrece jugos naturales como naranja o toronja, y prepara un refrescante cóctel sin alcohol, como un mimosa con jugo de naranja y agua con gas.
Finalmente, la presentación es clave. Usa platos y servilletas bonitas, y decora la mesa con flores frescas. Un brunch bien presentado no solo sabe mejor, sino que también crea una experiencia memorable.
Con estas ideas, tu brunch casero será todo un éxito. ¡Buen provecho!