La forma en que nos informamos y conectamos ha evolucionado dramáticamente, y hoy en día, las redes sociales son las protagonistas. Un estudio reciente de la agencia global MARCO lo confirma, revelando que plataformas como WhatsApp, YouTube y Facebook son las fuentes de información más populares en México. Este cambio es especialmente relevante para nosotras, ya que utilizamos estas plataformas no solo para el entretenimiento, sino también como una herramienta clave para estar al día, conectar con nuestras amigas y seguir a nuestras marcas y creadoras de contenido favoritas.
El estudio, llamado Encuesta Internacional al Consumidor 2025, destaca que los periódicos tradicionales se están quedando atrás, mientras que las redes sociales, con su inmediatez y formato visual, están ganando terreno. Plataformas como TikTok (9.4%) e Instagram (9%) no solo son espacios para el entretenimiento, sino que se están convirtiendo en fuentes confiables de noticias y tendencias, una señal clara de que nuestra forma de consumir contenido está evolucionando. Nos encanta la rapidez y el formato visual, y buscamos información que se adapte a nuestros intereses de forma personalizada. TikTok e Instagram han sabido capitalizar esta necesidad, ofreciendo contenido que nos permite estar al tanto de las últimas tendencias de moda, belleza, bienestar y noticias importantes, todo en un solo lugar.
Sin embargo, con este acceso a información instantánea, también viene un gran desafío: la desinformación. El estudio de MARCO revela que un impresionante 83% de los encuestados ha estado expuesto a noticias falsas, una cifra que nos recuerda la importancia de ser críticas con lo que leemos. A pesar de esto, solo la mitad de quienes identifican noticias falsas las denuncian. Esto nos obliga a ser más conscientes de la información que compartimos y a verificar las fuentes antes de dar por cierto algo que leemos en la web.
Raúl Valencia, Country Manager de MARCO en México, comenta que este cambio en el consumo de medios no solo ofrece oportunidades para las marcas, sino que también nos hace responsables a todas de asegurarnos de que el contenido que consumimos y compartimos sea real y confiable. En este mundo digital, donde todo se mueve tan rápido, la confianza se convierte en la nueva moneda de cambio. Para nosotras, que buscamos estar informadas y conectadas, esto significa ser más proactivas, verificar la información y apoyar a los medios y creadores que promueven la transparencia.